IV Jornadas Internacionales de Artes del Espectáculo y Judeidad

10/04/2021 - 10:00
Monstruosidades

IV Jornadas Internacionales de Artes del Espectáculo y Judeidad

Monstruosidades

 

Área de Investigaciones en Artes del Espectáculo y Judeidad. Instituto de Artes del Espectáculo “Dr. Raúl H. Castagnino”. Facultad de Filosofía y Letras. UBA. Argentina

Centro de Estudios Judíos. Universidad de Minas Gerais. Brasil.

20 de diciembre de 2020 

Agradecemos la generosidad de Graciela Manchado por la imagen de las Jornadas. Se trata de la obra "Libro de anotaciones del Dybbuk". Libro antiguo intervenido-30x40 cm. Realizado para la muestra curada por LABA-BA: Laboratorio de Arte y Cultura Judía en Buenos Aires- Presentación del libro El dibuk-Entre dos mundos. Un siglo de metáforas, de Susana Skura y Melina Di Miro (comps.), Centro Cultural Paco Urondo, 2019.

 

SESIÓN 1: Un retorno incesante: el dibuk y sus metáforas. 

Conversan: Susana Skura, Melina Di Miro, Sofía Brailovsky y Silvia Hansman. 

Susana Skura  
Magister en Análisis del Discurso y Licenciada en Ciencias Antropológicas (orientación Sociocultural) por la Universidad de Buenos Aires, posee un Posgrado en Psicología Social. Egresada de Editti. Es Profesora Adjunta de Lingüística y Semiótica y Jefa de Trabajos Prácticos de Etnolingüística de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires. Ha dictado seminarios sobre judeolenguas, teatro ídish y literatura judía. Fundó y coordina el Área de investigaciones en Artes del Espectáculo y Judeidad (Instituto de Artes del Espectáculo UBA) y la Capacitación Universitaria Extracurricular en Prácticas y Poéticas de la Judeidad Argentina (UBA-Sholem Buenos Aires) ha dirigido proyectos de investigación Ubacyt sobre la temática desde 2010. Es coautora de Oysfarkoyft/Localidades agotadas/Sold Out. Afiches del teatro ídish argentino; ´Y nadie quería saber´. Relatos sobre violencia contra las mujeres en el terrorismo de Estado en Argentina; Testimonio y archivo, y compiladora de Sh. An-ski, El Dibuk: Teatro y Etnografía, Reflexiones sobre el ídish, El habla en interacción. La comunidad, y Lenguaje, cultura y Sociedad. Perspectivas integradoras y, en colaboración, Teatro ídish argentino 1930-1950 y El dibuk-Entre dos mundos. Un siglo de metáforas. Publicó contribuciones en libros y revistas académicas de Argentina, México, Estados Unidos, Israel, Alemania, Países Bajos, Rusia y Brasil. Integra el comité editorial de la revista Corpus. Archivos de la Alteridad Americana, es miembro del Consejo asesor de la revista Latin American Jewish Studies y del Comité Científico de la Red de Lingüistas en Formación.  

Melina Di Miro
Dra. Profesora y Licenciada en Letras por la Universidad de Buenos Aires. Ha contado con una beca de dicha Universidad, sobre los procesos de integración en la narrativa de Samuel Glusberg y Alberto Gerchunoff. Ha organizado y participado en distintos congresos acerca de la literatura judeo-argentina y ha publicado sobre esta temática en revistas académicas de Argentina, Chile, Brasil y Estados Unidos. Colabora con el Área de investigaciones en Artes del Espectáculo y Judeidad (IAE-UBA), y es miembro del Área de Investigaciones en Artes del Espectáculo y Judeidad (Instituto de Artes del Espectáculo “Raúl H. Castagnino”. UBA) y del equipo de investigación “Historia comparada de las literaturas argentina y brasileña” (INDEAL-UBA), cuyos resultados se han publicado en la serie Historia Comparada de las Literaturas Argentina y Brasileña. Compiló y editó junto a Susana Skura El dibuk. Un siglo de metáforas. 

Sofía Brailovsky 
Licenciada en Ciencias Sociales. B.S. en Ciencias Pedagógicas. Profesora para la Enseñanza Primaria. Egresada de Editti. Especialista en Estudios de Género. Especialista en Educación y TIC. Profesora Adjunta por concurso a cargo de la Cátedra de Género y DDHH y del Seminario de Educación Sexual Integral. Jefa de trabajos prácticos por concurso de la materia Problemática Educativa. Investigadora del Instituto de Investigación en Ciencias Sociales y Humanidades. Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de Jujuy. Coordinadora del Área Académica de Género y DDHH. Cofundadora y Codirectora del Área Interdisciplinaria de Estudios de la Mujer y de Género FHyCS-UNJu. Capacitadora docente en Educación Sexual Integral. Vicepresidenta de la Asamblea permanente por los Derechos Humanos (APDH) Regional Jujuy.

Silvia Hansman 
Magister en Diseño Instruccional (Med. MID, Auburn University, Al) con especialización en gestión de archivos y postgrado en historia europea de la Universidad de Florida Central (UCF, Florida). Es investigadora del Área de investigaciones en Artes del Espectáculo y Judeidad (Instituto de Artes del Espectáculo. FFyL- UBA) y del el proyecto “Artes del Espectáculo y judeidad. Partes I y II. Actores, poéticas y cartografías” (2018-2022). Sus principales áreas de interés son la teoría y la práctica archivística en relación con la historia política, los estudios de género, las migraciones y el teatro ídish. Es directora del Archivo Histórico de la Fundación IWO. Desarrolló proyectos archivísticos en el Archivo Histórico de la Asociación Argentina de Productores Teatrales, en el Departamento de Cine, Audio y Video del Archivo General de la Nación, en el Centro de Estudios de Museo Nacional Ferroviario y en el Archivo del Presidente Raúl Alfonsín, entre otros.  

 

 

SESIÓN 2: Palabras para decirlo: tratar lo intratable. Dialogan: Perla Sneh y Laura Estrín

Perla Sneh
Escritora, psicoanalista, investigadora, traductora literaria del ídish. Estudió en la Akademia le’Omanut ve’Itzuv Bezalel (Bezalel Academy of Arts and Designa) de Jerusalén, en la Universidad de Buenos Aires y en el Instituto Ángel Garma (Asociación Psicoanaítica Argentina). Es Licenciada en Psicología y Doctora en Ciencias Sociales por la UBA, profesora titular de la Universidad Nacional de Tres de Febrero y profesora invitada en la Universidad de Rosario. Es investigadora Sr. del Centro de Estudios sobre Genocidio (UNTREF) y coordinadora académica de la Especialización en Estudios Judaicos y Judeoamericanos del Doctorado en Diversidad Cultural (UNTREF). Integró la revista Redes de la letra -Escrituras del Psicoanálisis y el comité editorial del IWO-Shriftn (Anales del Instituto Científico Judío). Es organizadora y docente de seminarios en el Seminario Internacional de Idioma y Cultura Idish (UNTREF-IWO). Ha colaborado con artículos y ensayos en revista del país y del exterior. Ha publicado los poemarios ciudad autónoma, (Zama/Paradiso, 2004), bíblicos (del Dock, 2006), Jarabe de pico (Letranómada, 2010), la novela Lengua vespertina (Grupo editor Latinoamericano, 2019) y los ensayos La Shoah en el Siglo - Del lenguaje del exterminio al exterminio del discurso (e/c Dr. J.C. Cosaka, Xavier Bóveda, 1999) y Palabras para decirlo - Lenguaje y exterminio (Paradiso, 2012), libro que fue distinguido con el Premio Nacional (Primer Premio, categoría Ensayo Sociológico, producción 2009-2012) otorgado por el Ministerio de Cultura del Gobierno de la Nación Argentina. 

Laura Estrin 
Escribió César Aira. El realismo y sus extremos (1999), Literatura rusa. Acerca de Bieli, Blok, Gorki, Bábel, Shklovski, Tsivietáieva, Jlébnikov, Platonov y Dovlátov (2012), El viaje del provinciano. Lecturas argentinas (2018) y Memoria irreversible. Un libro de retratos. Trabaja en Filosofía y Letras (UBA), en el Instituto de Literatura Argentina “Ricardo Rojas” desde 1992 y en el Instituto de Artes del Espectáculo participa del Ubacyt dirigido por Susana Skura (su Ensayo: “Musicantes. La literatura judía argentina. Interrogantes y algún registro. Sara Gallardo: Pantalones azules; Nora Strejilevich. Relatos terribles y precisas palabras; -Perla Sneh, Lengua vespertina en ´la tarde de las separaciones´; Susana Szwarc, -Decir la suerte.” Sus ensayos están en Políticas de la crítica (1999), Historia del ensayo argentino (2003), Las políticas de los caminos (2009) y Boedo. Políticas del realismo (2012). Fundó Santiago Arcos Editor, dirige la serie de autores argentinos en Letranómada y la de traducciones de Añosluz. Ordenó y prologó Lata peinada de Zelarayán (2008). Participó en El efecto Libertella (2011), en Ritvo. Una poética de la interrupción (2011), en C.Correas. Decirlo todo (2012) y en Zelarayán (2015). Proyectó, seleccionó y prologó Simbolistas rusos (2006), Mi Pushkin, Tres poemas (2006) y Cazador de ratas de Tsvietáieva (2007), Poesía lírica de Maiakovski (2015), las Cartas de Chejov (2010), la Tercera fábrica y Érase una vez de Shklovski (2012), La reserva nacional Pushkin y El oficio de Dovlátov (2016), Retratos (2013) y Dramas (2019) de Tsvietáieva y la obra de Jlebnikov, El rey del tiempo. Sus libros de poesía son: Álbum (2001), Parque Chacabuco (2004), Alles Ding (2007), A maroma (2010), Tapa de sol (2012), Ataditos (2017) y Ánimas (inédito). 

 

 

SESIÓN DE CIERRE: “Der Volf”: Un pogrom, un rabino (y) un lobo. Presentación musical. Yasmin Garfunkel

Yasmin Garfunkel 
Licenciada y Profesora en Artes, orientación Música, por la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires y técnica en Canto Lírico por el Conservatorio Superior de Música Manuel de Falla. Continúa perfeccionándose en técnica vocal con Ana Sirulnik y en repertorio operístico con Marcela Esoín. Ha realizado cursos de interpretación de música de cámara con Guillermo Opitz y de música del barroco, tanto en Argentina, con Andrés Gerszenzon e Igor Herzog, como en el exterior, con David Stern y Dominique Labelle. Ha cantado en las salas del Teatro Colón, Usina del Arte, Teatro Gran Rex, Centro Nacional de la Música, Templo Libertad y American Shakespeare Center’s Blackfriars Playhouse, EE.UU, entre otras. Además de intérprete, se encuentra trabajando como compositora junto a Diego Schnitman sobre un ciclo de canciones original denominado Der Volf. Se desempeña como docente de música y canto y conforma como cantante el proyecto IDISHPIL junto al pianista Federico Garber, con el objetivo de explorar la “canción ídish” en Argentina. Integra el Área de Investigaciones en Artes del Espectáculo y Judeidad del Instituto de Artes del Espectáculo "Dr. Raúl H. Castagnino", FFyL, UBA, y cursa la Capacitación Universitaria Extracurricular en Prácticas y Poéticas de la Judeidad Argentina (UBA). 

Diego Schnitman 
Su instrumento principal es la guitarra, cuyo estudio comenzó durante la adolescencia. Conformó agrupaciones de música popular y compone canciones que atraviesan diversos géneros como el rock, el pop, el folclore argentino y el jazz. Su relación con el arte no pasa únicamente por la música, sino que además es arquitecto en ejercicio. Este año compuso junto a Yasmin Garfunkel las dos primeras canciones del ciclo denominado Der Volf. 

Federico Garber 
Cursa actualmente el Profesorado de Educación Musical en el Conservatorio Superior de Música Ástor Piazzolla y participa como pianista en numerosos proyectos musicales tales como el Coro de Garage y el espectáculo de teatro musical “Eva, Rebelión de Amor”. Integra como pianista el proyecto IDISHPIL junto a Yasmin Garfunkel.

 

“Der volf”: Un pogrom, un rabino (y) un lobo. Presentación musical Yasmin Garfunkel (IAE-UBA) 

Esta presentación musical de tres canciones (en) ídish surgió a partir de la búsqueda de repertorio relacionado con “Monstruosidades”, temática propuesta en el marco del Área de Investigaciones en Artes del Espectáculo y Judeidad del Instituto de Artes del Espectáculo "Dr. Raúl H. Castagnino" donde me desempeño como investigadora. 

Para eso, decidí circunscribir la pesquisa a “monstruos”, entendiendo por éstos a “criaturas ominosas que merodean en los callejones de la historia exponiendo fragilidades, inseguridades, temores y deseos de las culturas en las cuales aparecen” (Idelson-Shein 2019: 1). El monstrum es etimológicamente “aquel que revela”, “aquel que advierte”. 

Como intérprete y musicóloga, conocía previamente ejemplos dentro del folklore ashkenazí y la literatura ídish como los del golem y el dibuk, pero no encontré canciones que se relacionaran directamente con ellos. Por este motivo, viré mi búsqueda hacia poemas o relatos que incluyeran ese tipo de personajes para luego musicalizarlos o, si fuera necesario, adaptarlos y componer la música. Fue así que encontré Der Volf, cuyo argumento me maravilló desde el primer momento. Me propuse leerlo en su idioma original, el ídish, y adaptarlo, es decir, seleccionar fragmentos casi sin modificarlos para contar la historia en canciones. Hasta el momento contamos con las dos primeras canciones que se corresponden con la primera sección del poema. 

El monstruo que nos convoca o, mejor dicho, que convocamos, es entonces el hombre- lobo, un híbrido perturbador que, de acuerdo con Jeffrey Jerome Cohen, evade una simple categorización y puede ser utilizado como un significante para distintos tipos de transgresiones, desórdenes y deseos (Lembke 2019). Más aun, no se trata de un hombre común que se transforma en lobo, sino de un rabino. En este sentido, la de Leivik no es la primera obra en la que aparece un rabino-lobo, sino que “(...) la editio princeps de 1602 del Mayse-bukh (colección de cuentos tradicionales ídish) incluye el relato de un rabino piadoso convertido en lobo por su malvada esposa, y que se caracteriza por ser extremadamente violento y a la vez muy racional” (Lembke: 202). 

Muy distinto es, tal como veremos a continuación, el motivo que desencadena la transformación del rabino en lobo en Der volf. H. Leivik escribe el poema narrativo o “crónica” en 1920, un año después de que se perpetraran en Ucrania durante la guerra civil rusa los pogroms más masivos y sanguinarios anteriores al Khurbn, que implicaron la masacre de un número estimado de 50.000 judíos. Es el tercero de cuatro poemas considerados como “apocalípticos” o “visionarios”: Er (Él), Dos kranke tsimer (La habitación enferma), Der volf(El lobo), y Di shtal (El establo). Cabe mencionar que al mismo tiempo que escribía Der volf, Leivik se encontraba trabajando en su obra de teatro Der golem. Dramatishe poeme in akht bilder, publicada en 1921 y estrenada en 1925 en Moscú. 

La crónica de Der Volf comienza el tercer día luego de un pogrom durante el cual un shtetl (villorio) anónimo es reducido a cenizas y escombros. Entre las ruinas, su único sobreviviente, el rabino del pueblo, recobra la conciencia. Esto no es de ningún modo un feliz despertar. Los victimarios se han ido y las víctimas han perecido. En cuanto el rabino comienza a buscar los restos de sus vecinos para poder enterrarlos de acuerdo con la tradición judía, se da cuenta de que nada ha quedado, sólo brasas y cenizas, por lo que no puede cumplir con su deber halájico hacia los muertos. 

Al caer la noche, da un giro hacia el oeste (el sentido opuesto hacia el cual los judíos tradicionalmente rezan) y sigue el camino que conduce desde el pueblo masacrado hacia el bosque. “Con profunda desesperación, como si hubiera sido abandonado por la Ley (y por Dios)” (Geller: 254) corre para adentrarse en el bosque, y en el momento en que cruza el límite de la zona habitada, es atrapado por las redes empleadas para evitar que los lobos entren al pueblo. Lo que sucede a continuación es la aparente transformación del rabino en un lobo. 

Judíos expulsados de otras comunidades comienzan a llegar al pueblo y lo primero que hacen, además de reconstruir las casas devastadas, es volver a poner en pie la gran sinagoga, de la cual sólo quedan paredes despojadas. El rabino se presenta ante ellos y le piden que realice los servicios religiosos, pero él insiste en que las ruinas permanezcan allí en recuerdo de su generación perdida y que, por lo tanto, el templo no sea reconstruido. Los nuevos moradores no le hacen caso y, en consecuencia, el rabino devenido lobo aúlla cada noche para aterrorizarlos. Mientras acontece Ne’ilá en Iom Kipur, irrumpe el hombre- lobo en la sinagoga, donde es herido a muerte por uno de los fieles, otorgándole definitivamente un alivio a su sufrimiento y existencia, ligada al resto de su generación asesinada. Los nuevos habitantes pueden finalmente reconstruir su vida comunitaria. 

Siguiendo a Geller, el licantrópico protagonista transita a través de un terreno moldeado por las interrelaciones entre la agencia (humana), la comunidad, la Ley, la violencia mortal, la redención y, agrego, la culpa. Al respecto, me resuenan las palabras de Eliahu Toker (1972) sobre Leivik: 

Toda la obra de Léivik constituye una larga reflexión centrada en la persona, y toda su maestría en el manejo de lo poético y de lo dramático, no es en sus manos sino la herramienta que emplea para cavar hondamente en sí mismo, en las ideas, en el devenir de la realidad. Los personajes que habitan obsesivamente su obra son los protagonistas de su infancia y adolescencia: sus padres, las figuras bíblicas, el Mesías, la redención, la culpa, el heroísmo y el martirio. 

Más aun, en el poema de Leivik No estuve en Treblinka, según este autor, aparece con toda claridad la culpa, multiplicada por los años que dura el martirio del judaísmo europeo, mientras él permanece en Nueva York: "Yo debí morir con vosotros/ pero las fuerzas me faltaron/ y lo hago todo por ocultar ahora/ el debatirse de mi palabra y de mis manos” (íbid.,). Pareciera como si Leivik atravesara por lo mismo que el personaje de su poema escrito veinticinco años antes. 

En cuanto a S’brent como canción que abre esta presentación musical, su elección radica en que tanto su letra como su melodía expresan el dramatismo de un pogrom mientras está aconteciendo, hecho que no se presenta en la crónica de Der volf, ya que como dijimos anteriormente, la acción comienza la tercera mañana luego de la masacre. S’brent describe el incendio del shtetl. El narrador, en primera persona, incita a los judíos a que no permanezcan inmóviles, que apaguen el fuego y que se defiendan aunque les cueste su propia sangre. Vale mencionar que Gebirtig escribió la canción en 1938, dos años después del famoso pogrom acaecido en el pequeño pueblo de Przytyk, al que posiblemente esté haciendo referencia. Por lo tanto, aquí la monstruosidad se manifiesta en el acto del hombre común, y luego será lleva a su máxima expresión a manos del nazismo.