Por Jimena Cecilia Trombetta // Co-coordinadora del Área de Investigaciones en Teatro y Artes Escénicas
Mensaje bailado de Luis Cano se trata sobre el amor, la amistad, la familia, y todas las formas de que puedan surgir. Sobre esta particular puesta Luis Loyola Cano comparte: "Este proyecto se basa en una dramaturgia escrita durante el inicio de la pandemia en 2020. La escribí por amor a otras personas y con la necesidad de reunirnos. Simplemente me dejé llevar por las ganas de regalarles un texto que sirva para jugar. Nuestro proyecto intenta ofrecer diferentes caminos de representación, diversas formas de comunicarnos e intercambiar alegría. Hoy nos entregamos a este Mensaje bailado presencial, con todo nuestro cariño, deseando que la tarea siempre sea un lugar de encuentro"*.
Esta puesta, que lleva bajo su dirección en el teatro No avestruz, recupera algunos fragmentos del libro Una afirmación del amor, editado por EUDEBA y Proteatro en el 2020. En él reúne una trilogía de textos dramáticos que circundan la temática que ofrece Mensaje Bailado en cuerpo presente, a corazón latiendo. En medio de estos textos: “Chajá”; “En la pampa esta noche”; y “Verano”; aparece un archivo de poemas abandonados que Mensaje bailado retoma. Esos poemas caen en boca de alguno de los protagonistas de la puesta.
Entre los fragmentos de poesía, que en muchos casos se disparan directo a la libre asociación y al re(cordar) –o volver a pasar por el corazón- de los personajes y de los espectadores, existe una estructura de personajes, y hasta un hilo de acciones. Olga llega junto a Fran a casa de Julieta y Bruno. Cheré, que ya estaba allí se pregunta sobre esa relación, mientras extraña la cercanía de Fran; y acompaña la estadía del matrimonio derruido entre Julieta y Bruno. Es esa situación donde cada personaje vive su propio monólogo interno, aparece “Ana”, mensajera del amor, que trae un mensaje bailado, unas flechas dispuestas a caer en cualquier personaje de la obra (y de la platea), que aún busque conmoverse con. Y mientras Olga se encuentra, Julieta y Bruno parecen querer soñar hondas heridas de pérdidas.
En esa trama, donde el lenguaje busca decir de algún modo eso que… se recurre a la intertextualidad con esos poemas abandonados y editados en Una afirmación del amor. No es extraño escuchar por boca de Bruno trémulas palabras familiares:
mamá dejó la hornalla destapada
cortó el teléfono para que no molesten
le dio veneno al gato
tiró las cartas de abogados y escribió un papel
diciendo que no quedaba nada
en la nota,
descansá
te veo de mal humor últimamente
me dijo
y al lado una aspirina y un vaso con agua **
Contenido aparte, pero que confluye con el panorama amoroso, crítico y de constante búsqueda, la escenografía también habla del ambiente gestado en un espacio vacacional, entre la playa y el campo. Entre la tranquera, las casas en madera blanca, la cuerda para colgar aromas y recuerdo que desprenden la ropa de los huéspedes y una pequeña pileta para lavar culpas y desamores, son algunos de los signos que aparecen en la escena. Todos para conformar ese escenario de búsqueda, y por ende también de ejercicio para la memoria de los que ya no están entre esas paredes.
*Alternativa Teatral
**Loyola Cano, Luis, (2020) Una afirmación del amor. Trilogía de textos dramáticos, p. 127